Tesis de licenciatura en sociología de la Pontificia Universidad Católica del Perú
Problema de investigación
El mundo rural peruano ha experimentado diversos cambios durante las últimas décadas. Las nuevas tendencias demográficas, la influencia de la globalización y la expansión del mercado son algunos de los procesos que han configurado nuevas dinámicas en los contextos rurales. Sin embargo, a pesar de estas nuevas dinámicas y cambios, la agricultura como actividad económica continúa siendo predominante en estos espacios. Asimismo, es la agricultura familiar cuyo componente fundamental es el aporte de la familia a la mano de obra es la más importante dentro del rubro agrícola.
Como producto de estos cambios y paralelamente a ellos, han surgido diversos enfoques para analizar estas nuevas tendencias. Entre estos se ubica el enfoque del desarrollo territorial rural (DTR). Este enfatiza la configuración del territorio y las dinámicas presentes en dichos contextos bajo dos elementos claves: el componente institucional y el aparato productivo. Al partir de este enfoque, se pretende dar un marco general para entender cómo se configuran las estrategias de vida de los agricultores y agricultoras bajo el contexto y el territorio, enmarcados en condiciones institucionales y productivas. Es decir, se trata de articular manifestaciones tanto individuales como colectivas –las estrategias de los agricultores y agricultoras– en un marco que las posibilita y las configura: las dinámicas en torno al Valle del Mantaro.
Si se revisan datos sobre agricultura del país, se halla que del total de la Población Económicamente Activa (PEA) ocupada 1 para el año 2012, 2 el 24 % se encontró laborando en la rama de actividad agropecuaria. Dentro de este rubro, el 83 % pertenecía a hogares considerados como agricultura familiar. A nivel regional, el 51 % de la PEA ocupada agropecuaria se ubicaba en la costa, el 92 % en la sierra y el 83 % en la selva. (Eguren y Pinedo, 2015: 8). Además de ello, la agricultura familiar generó empleo en otros rubros distintos. Estos hogares representaron el 26 % del total de ocupados en el sector minero, el 18% en la pesca, el 15 % en construcción, el 12 % en los sectores comercio y manufactura, el 11% en servicios, el 8 % en el sector transportes y comunicaciones, y finalmente, el 7 % en otros servicios. (Eguren y Pinedo, 2015: 9). En síntesis, se halla que más del 90 % del total de las unidades agropecuarias 3 a nivel nacional pueden ser consideradas como agricultura familiar.
Estos datos sugieren que los hogares de agricultura familiar representan el mayor porcentaje de trabajo agrícola y se encuentran, principalmente, concentrados en la región de la sierra. No obstante, esta actividad no es de dedicación exclusiva: estos hogares se encuentran vinculados con un portafolio de actividades, mediante los cuales diversifican sus ingresos. Este panorama sugiere preguntarse por qué los productores y productoras diversifican sus actividades, qué sentido cobra la agricultura familiar en sus rutinas diarias, qué motivaciones existen para producir y de qué medios disponen para obtener sus medios de vida en el marco de la agricultura familiar.
En ese sentido, la presente investigación analiza la configuración de estrategias de vida de productores y productoras convencionales y orgánicos en dos comunidades del Valle del Mantaro. En esta configuración se presta especial atención a la influencia y al papel clave que cumplen los componentes de innovación tecnológica, generación de conocimiento y articulación al mercado. Asimismo, la apuesta consiste en discutir cómo estas estrategias se enmarcan en contextos más amplios. Para cumplir con este objetivo, se discute con tres perspectivas teóricas: el enfoque de desarrollo territorial rural, el enfoque de agricultura familiar y el enfoque de agricultura orgánica.
Metodología
La metodología de la investigación es de carácter exploratoria cualitativa. Se eligieron dos distritos que promovieran estos enfoques agrícolas: el distrito de Sapallanga, con un enfoque más convencional y el distrito de Pucará, con uno más orgánico. El análisis de la investigación se basa en la revisión de datos del último Censo Agrario del año 2012 y en entrevistas en profundidad realizadas a productores y productoras, así como autoridades claves de los lugares señalados.
En ambos distritos 4 se halla una alta concentración de población rural con vulnerabilidad alimentaria, en proceso de inclusión, en situación de pobreza y pobreza extrema; con altos niveles de desnutrición crónica y con bajos índices de desarrollo humano. Si se comparan ambos distritos, la situación de Pucará es menos favorable que la de Sapallanga. La siguiente tabla resume los indicadores mencionados anteriormente:
Cuadro 1. Indicadores sociodemográficos a niveles nacionales, regionales y locales
Fuente: MIDIS (2015) y PNUD (2012). Elaboración propia.
Las unidades de análisis son los pequeños productores y productoras residentes en ambos distritos. Asimismo, se consideró relevante tener en cuenta la información de autoridades claves 5. Los criterios para escoger a los productores y productoras fueron los tres siguientes: i) ámbito de residencia: Pucará o Sapallanga, ii) cohortes de edad: de 18 a 60 años (adultos) y de 61 años a más (adultos mayores), iii) género: femenino o masculino.
Las fuentes de información que se han empleado son de carácter primario y secundario. Para recoger información secundaria, se han empleado datos recogidos del portal web de Info MIDIS adscrito al Ministerio de Desarrollo e Inclusión Social, para caracterizar el territorio y datos del Censo Agrario del año 2012, realizado por el Instituto Nacional de Estadística e Informática (INEI) para caracterizar el perfil agrícola de ambos distritos.
Los instrumentos que se emplearon para acopiar la información fueron los tres siguientes. Para los productores y productoras se empleó una ficha sociodemográfica que recogió sus principales características sociodemográfica, así como una guía de entrevista semiestructurada. De igual modo, se aplicó otra guía de entrevista semiestructurada a informantes clave de ambos distritos.
Principales hallazgos
Las estrategias de vida se configuran en función a la capacidad de agencia de los productores y productoras con respecto de sus contextos institucionales y productivos. Es el resultado de las tensiones entre agencia, entendida como voluntad, capacidad y decisión de los productores y la estructura, expresada en el mercado e instituciones. Los avances en innovación tecnológica, generación de conocimiento y articulación al mercado son escasos. De acuerdo a los hallazgos de la investigación, el rubro que presenta menos avances es el de innovación tecnológica y paradójicamente se considera como el más urgente para avances en materia agrícola. En relación con la generación de conocimiento, se hace evidente la predominancia del conocimiento tradicional que se plasma en prácticas de carácter también tradicional. Asimismo, la articulación al mercado todavía presenta retos institucionales para que los productores y productoras puedan integrarse de manera óptima y sin enfrentar tantas dificultades que disminuyan sus beneficios.
Estas estrategias de vida tienen motivaciones similares con respecto de la agricultura, ya que identifican esta actividad como su principal medio de trabajo, de ingreso y de sustento alimenticio. No obstante, la agricultura orgánica «añade» el componente de salubridad y de inocuidad a este «paquete» de motivaciones. Además, son una parte fundamental dentro del panorama de agricultura familiar. Permiten contrastar cómo se organizan los hogares en función de proveer sus medios de vida (estrategias de diversificación, por ejemplo) y el vínculo de la actividad agrícola con el entorno (motivaciones, por ejemplo).
El panorama de las estrategias de vida, enmarcadas en la agricultura orgánica, enfrenta una paradoja. En el enfoque de desarrollo territorial rural prima el apoyo a los sectores de exclusión y pobreza rural. En este marco, la agricultura orgánica ha logrado avances significativos. Si bien se reconoce que su avance se debe a una serie de esfuerzos institucionales y se reconoce que presenta mejores oportunidades para la agricultura a largo plazo, es la que muestra una mayor debilidad para la articulación a los mercados. Asimismo, es importante cuestionarse sobre la sostenibilidad de este modo de producción si es que el apoyo institucional se retirase. En contraste, la agricultura convencional presenta una mayor articulación al mercado. No obstante, se cuestiona si este modo de producción está velando por la sostenibilidad de la producción.
En síntesis, los hallazgos de la investigación muestran que las limitaciones institucionales y productivas de estos territorios acotan las estrategias que puedan desplegar los productores y productoras. No obstante, en el marco de sus capacidades, capitales y oportunidades, optimizan los medios que disponen, reconociendo así su capacidad de agencia sobre el entorno.
- El INEI define a la PEA ocupada como la población que participa en la generación de algún bien económico o en la prestación de un servicio (población ocupada). Se encuentra comprendida por todas las personas de catorce (14) años y más de edad que en un determinado periodo de estudio se encontraban: a) Trabajando, b) No trabajaron pero tenían trabajo, c) Se encontraban buscando activamente un trabajo. (Portal web del INEI). ↩
- Se toma como referencia este año, ya que durante este periodo se realizó el Censo Agropecuario. ↩
- El INEI define a las unidades agropecuarias para el Censo Agrario del 2012 como “el terreno o conjunto de terrenos utilizados total o parcialmente para la producción agropecuaria incluyendo el ganado, conducidos como una unidad económica, por un productor/a agropecuario/a, sin considerar el tamaño, régimen de tenencia ni condición jurídica” (INEI, 2013: 13). ↩
- Las cifras presentadas son una síntesis de diversas fuentes de información secundaria: i) Censo Nacional 2007: XI de Población y VI de Vivienda, ii) Encuesta Nacional de Hogares – ENAHO 2013, iii) Encuesta Demográfica y de Salud Familiar – ENDES 2013 (Instituto Nacional de Estadística e Informática), iv) Observatorio Distrital de Programas del Ministerio de Desarrollo e Inclusión social de Perú (2015, v) Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo – PNUD 2009. ↩
- Se conversó con autoridades de las respectivas Municipalidades Distritales y de la Dirección Regional de Agricultura de ambos distritos. ↩
ME GUSTARIA TENER CONTACTO SOBRE EL TRABAJO DE LA INVESTIGACION, GRACIAS