Carolina Trivelli, Javier Escobal y Bruno Revesz. Desarrollo rural en la sierra. Aportes para el debate. Lima: CIPCA, GRADE, IEP, CIES, 2009

Desarrollo rural en la sierra. Aportes para el debate es un trabajo que marca un hito en el estudio de la promoción del desarrollo de la sierra peruana. El lector interesado en la construcción de futuros del Perú reconocerá con pesar que los avances en la sierra son todavía pequeños frente a los desafíos. Esta parte fundamental del territorio nacional aún concentra pobreza y pobreza extrema, que la convierten en uno de los más grandes retos del Perú contemporáneo. El contenido de información cualitativa y cuantitativa, la amplia variedad de áreas del conocimiento que cubre y la claridad con que está escrito hacen de este libro un trabajo integral para los lectores provenientes de las más diversas disciplinas que pretendan conocer mejor la realidad y porvenir de la sierra peruana.

El libro advierte la carencia de mecanismos para acopiar y extraer lecciones de experiencias positivas y negativas ocurridas en la casi indescifrable unicidad de la sierra. Pero también reconoce que en ella no priman la precariedad y la escasez —como afirma el mito—, sino que se trata de un espacio dinámico, con iniciativas, aprendizajes y capacidad de combinar recursos para su avance social y productivo.

Lo heterogéneo de la sierra la hace compleja desde los ángulos social, económico, cultural, geográfico y ecológico. Para tener éxito se necesita la flexibilidad suficiente para adaptar las propuestas a territorios de contrastes y encuentros únicos. El texto propone discutir sobre cinco ejes temáticos, partiendo de cómo las propuestas de desarrollo rural han evolucionado en el tiempo, retomando y añadiendo elementos nuevos del contexto serrano. Luego, trata el papel de los actores institucionales locales (en especial municipios provinciales y distritales) y emprende una discusión sobre el potencial y límites de los mercados de la sierra rural. Concluye con una discusión desde la visión del gobierno central sobre desarrollo rural y de la sierra rural en particular.

Tres interrogantes quedan abiertas para mayor debate e investigación: a) el modo como se generan, institucionalizan y se llega a consensos sobre aprendizajes en desarrollo rural; b) la forma como se articulan lo nacional, lo local y la solución de los disensos; y c) la manera como se promueve un desarrollo que combine mercado, instituciones, políticas públicas y la cooperación para una propuesta exitosa en lo social, productivo y ambiental.

Uno a uno los capítulos van adentrándose en los conceptos de la ruralidad, en la revisión de los trabajos más notables de autores como José María Caballero, Daniel Cotlear, Alejandro Díez, Fernando Eguren, Adolfo Figueroa, Jurgen Golte, Efraín Gonzales de Olarte, Bruno Kervyn, Carlos Monge, John Murra y Eduardo Zegarra.

En la “Fantasía del atraso” se ingresa al imaginario nacional en busca de las lecturas que se hacen de la sierra en el Perú y se plantea la necesidad de construir un proyecto intercultural para asimilarla en igualdad de condiciones a las potencialidades del país. Realmente se trata de un viaje excepcional por las interioridades de lo andino en el Perú contemporáneo. Más adelante, “Reconociendo la sierra” es una sinopsis cuantitativa de los Andes peruanos en una apretada pero útil numeralia de las fuentes más relevantes de información de la sierra.

En “Gobernanza de los territorios de la sierra” se precisa que aquella no es sinónimo de gobernabilidad, pues incluye las nuevas formas de gobierno, en las cuales entidades públicas y no públicas trabajan juntas y redistribuyen el poder dentro y fuera del Estado. Se revisan varios esquemas de políticas públicas para asignar recursos desde una perspectiva histórica con visión territorial, analizando los principales instrumentos e intervenciones y su impacto en el desarrollo rural de la sierra. Aquí reluce el rol de los gobiernos locales. En el capítulo sobre descentralización se trabajan dos casos de gobiernos locales en Cuzco y Piura que precisan las experiencias y temas pendientes de este proceso de compartir el poder y las responsabilidades.

En “El mercado y el desarrollo de la sierra” se tratan las relaciones entre infraestructura y el tipo y grado de articulación con los mercados de productos de la sierra. Destacan los mapas distritales que dejan ver la heterogeneidad de aquellos vínculos, y se proponen algunas medidas de políticas para construir y fortalecer los referidos mercados y enlaces. Para todo aquel que desee conocer más sobre el potencial de los distritos de la sierra será una excelente fuente sobre las particularidades productivas serranas.

La voz de los protagonistas se registra en el capítulo siguiente, ofreciendo las vivencias y el realismo del día a día de varios emprendimientos en Arequipa, Cuzco, Junín y Puno. Y como reflexión final se estudian las opciones de la política pública en el desarrollo rural, así como la estrategia de desarrollo rural de septiembre de 2004, que enmarca la acción del Estado central, implementada por los proyectos y programas del sector público agrario.

Se trata de un libro pulcramente editado e impreso, con tablas, gráficos y mapas, que llena un vacío para conocer más la sierra, con sus  cumbres y clima impredecible, como territorio de la pequeña agricultura, que abastece los mercados internos de alimentos. El volumen incluye amplia información y propuestas en los diferentes campos sociales y productivos sin olvidar lo ambiental. Al final, el balance de intervenciones permitirá que los hacedores de política reflexionen sobre la sierra y su potencial, pero también acerca de su pobreza crónica, que la afecta para alarma creciente de los peruanos.

La variedad de la sierra requiere una respuesta múltiple y adaptada a cada una de sus realidades. Esa particularidad le confiere mayor complejidad a los retos. Por eso hay que contar con un Estado muy eficiente, una educación con aprendizajes de calidad y una sociedad civil organizada, con vocación emprendedora y dominio del oficio de dirigir empresas, desde los talleres más modestos hasta las más intensivas en tecnología. De ese modo se comenzará a  superar el rezago y abrir la sierra al desarrollo y la esperanza.


* Licenciado en Administración y máster en Dirección de Empresas. Ex jefe del Fondo de Tecnología Agraria de Incagro y del Programa de Compensaciones para la Competitividad del Ministerio de Agricultura.