Pese a que Quito ha sido hace años un referente de ciudad con fuerte carácter patrimonial asociado al periodo colonial, en el periodo reciente han aparecido nuevas propuestas de patrimonio cultural que enfatizan el pasado prehispánico. Este artículo realiza un balance de parte de esta nueva propuesta a partir de tres museos abiertos hace relativamente pocos años: el Museo de la Ciudad, el Museo de Arte Prehispánico (en la Casa del Alabado) y el Museo Nacional del Ecuador (Muna). En los tres casos, el periodo prehispánico aparece plenamente integrado a la historia nacional del Ecuador a manera de continuidad histórica, aunque las propuestas difieren entre sí. Así, persiguen objetivos distintos, los recursos museográficos empleados difieren entre sí y tienen en mente públicos diferentes según el caso. Se destacan también ciertas inconsistencias en torno a cada propuesta que llevan a que algunas de estas terminen siendo tan ambiciosas como ambiguas, lo que no quita que se trata de parte de un renovado interés en la oferta de museos en la capital ecuatoriana.
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